Mientras manipulaba estas fotos mi nieta rondaba a mi alrededor, ha reparado un momento en la pantalla del ordenador y, me ha dicho de forma espontanea; qué bonitas!! de quien son? Le he dicho de quién y me ha contestado pero si son para un chico...!!
Pues sí, para un culé, no podían ser de otro color. Normalmente las zapatillas de estar por casa no forman parte de su vestuario, prefiere ir descalzo, pero... Éstas parece ser que nada más verlas le hicieron tilin.
Y bueno estas otras ya son el no va más. Ya dije en otro post que a Viges en este tema había que darle tiempo.
Le ha cogido el truquillo y ya es pura improvisación. La suela de goma de unas zapatillas viejas.
El resultado son unas zapatillas cómodas y calentitas.
Ah!! no pidáis patrones según me ha dicho las ha hecho sobre la marcha, adaptándose a la suela según el grueso de la lana, no tiene patrón ni ha cogido notas. Nosotras la mayoría de las veces funcionamos así, que le vamos a hacer! Nos es más fácil hacer que anotar.
¡Preciosasss!!
ResponderEliminar¡Me encantan! desde que vi las primeras.
ResponderEliminarUn beso a las dos
Parece que tenemos telepatía. Acabo de terminar dos pares, uno para mi y otro para mi hijo. Yo les he puesto unas plantillas de cuero suave que he encontado en un bazar. ¡Como le bordes el escudo del Barça, sale con ellas a la calle y todo, je, je...!
ResponderEliminarUauf!!!! son una preciosidad, estás hecha una profesional del tema
ResponderEliminarBesos, Mamen
Me suena eso de hacer las cosas improvisando jajaja, mi hijo está dando sus primeros pasos en la cocina y eso de que le diga que yo improviso le pone malo, quiere que mida por cucharadas o como sea, dice que quiere recetas para torpes y eso le estoy haciendo.
ResponderEliminarLas zapatillas me hicieron regresar a esos años de la posguerra en los que mi madre hacia que unas suelas fueran rentables poniéndoles varias telas, que bonito es el recuperar los trabajos de nuestras antepasadas; te mando una idea para Viges que la veo muy apañá, mi madre hacia unas zapatillas con lanas que urdía y tejía sobre una plantilla como las que se usan para dar forma a los zapatos, quedaban unas zapatillas monísimas para mí que era una niña, mi recuerdo es que las tejía como zurciendo con varios colores.
Besotes.